¿Qué es el flúor?

El flúor es un elemento imprescindible para el mantenimiento de la salud dental, en nuestro cuerpo se encuentra en los huesos y dientes, se encuentra también de manera natural en algunos alimentos como el pescado, la carne, el té, las papas pero en concentraciones muy bajas.

El flúor aplicado de manera tópica en los dientes ayuda a prevenir la aparición de lesiones de caries en los mismos, fortalece el esmalte dental y hace que la estructura interna del diente sea más fuerte y resistente a la destrucción, fomenta también la remineralización que ayuda a reparar la destrucción inicial antes de que la caries pueda verse clínicamente.

El flúor en barniz se aplica con un pincel en cada uno de los dientes, formando una película adherida a el, por eso, después de su aplicación se deben tener en cuenta ciertas consideraciones:

• No ingerir alimentos ni beber en 1 hora.
• Mantener una alimentación blanda, pastosa y líquida durante las siguientes 12 horas, para evitar la remoción del flúor.
• No cepillarse los dientes por 12 horas, pero después de las comidas el niño deberá enjuagarse la boca con agua.
• Si al día siguiente todavía existen residuos de barniz sobre los dientes del niño, podrán ser retirados con el cepillo dental.

Este producto no mancha ni tiñe los dientes.